
Todo medicamento registrado en nuestro país debe contener en su envase la fecha de vencimiento, la cual asegura la conservación de sus propiedades y la eficacia terapéutica.
Las fechas de vencimientos registradas dependerán del laboratorio productor. Algunos son más conservadores y dan rangos de 2 a 3 meses aproximadamente antes de que se produzca el vencimiento, por tanto, es recomendado respetar las fechas de caducidad para tener seguridad de que la terapia farmacológica va a surtir efecto.
Existen algunas formas farmacéuticas que son más susceptibles que otras al vencimiento, como por ejemplo el comprimido, tiende a tener mayor período de duración porque están expuestos a menos factores de cambio, sin embargo, los líquidos o inyectables, suelen ser más sensibles a la luz, humedad o el calor, pudiendo precipitar al mezclarlos, e incluso contaminarse fácilmente una vez abiertos.
La ingesta de medicamentos vencidos es potencialmente riesgosa para la salud, debido a que podría presentar efectos nocivos para el organismo, al presentarse alteraciones en sus propiedades químicas, físicas, terapéuticas, toxicológicas o microbiológicas del medicamento. Esto cobra más importancia, en los de administración intravenosa y fármacos estériles como los colirios. Sin embargo, lo que generalmente suele ocurrir es que el paciente experimenta inefectividad terapéutica, es decir, que el fármaco no produzca el efecto para que el que fue tomado. En el caso de un antibiótico vencido este podría perder su potencia, no combatir la infección, complicando la patología y pudiendo desarrollar una mayor infección, dificultar el manejo e incluso poder desarrollar resistencia antimicrobiana.
Es recomendado que se revisen periódicamente los medicamentos presentes en el hogar y respetar las fechas de vencimientos indicadas en su envase. En los casos de pacientes crónicos, si no se respeta la fecha de caducidad y no se genera el efecto farmacológico, podría ocurrir la progresión de la enfermedad. Por esto, es mejor no arriesgarse, y asegurarse que el medicamento siempre va a ser efectivo dentro de su vida útil.